Mi forma de trabajar.
Si escribo este texto es porque muchos de vosotros el primer día que nos reunimos me preguntáis cual es mi forma de trabajar, y cómo me desenvuelvo el día del reportaje.
Se que parece un tópico, pero la realidad es que cada boda es totalmente diferente, y esto es porque todas las parejas son diferentes. Por eso describir que sucede el día de una boda es difícil, ya que cada pequeña variación hace que todo sucede de manera diferente.
Para empezar diremos que el día que me contratáis ya empiezo a trabajar en el reportaje, realizando pequeñas anotaciones sobre lo que yo percibo de vosotros y lo que me trasmitís con lo que me contáis, sobre vuestros gustos y lo que esperáis de ese día. Las localizaciones, Iglesia, fincas, etc, me dicen el tipo de celebración que os gusta y lo que esperáis de la parte visual.
El planning.
Cuando se acerca el momento, un mes antes, ya empiezo a realizar un planning del día de vuestra boda, de las horas a las que estaré en cada localización, del tiempo que me lleva ir a cada una de ellas y siempre añadiendo minutos por si hay algún imprevisto ese día. Una vez que tengo el planning listo, os lo presento por si queréis realizar algún cambio o matización. Recordar que lo importante es que vosotros estéis cómodos y relajados ese día, nosotros nos acomodaremos a vosotros.
La preparación del equipo.
Una de las cosas más importantes, es la preparación del equipo que voy a utilizar, tenerlo preparado, organizado y en perfecto estado de funcionamiento es esencial para que el reportaje sea fluido y sin imprevistos. Equipos por duplicado, tanto en cuerpos de cámaras como en ópticas hace que esté seguro de que en cualquier imprevisto que suceda esté preparado. El tipo de cámaras no es algo importante hoy en día, ya que casi cualquier equipo es bueno, lo importante es como y quién lo utilice. Si me preguntáis que equipo utilizo, hoy llevo cámaras Nikon y Sony de sensor completo, pero mañana no lo se, ya que suelo utilizar equipos «cómodos», pensados más en que sean flexibles y me permitan trabajar cómodo que en otros más aparentes.
Las horas previas al reportaje.
Aunque parezca algo ridículo, las horas previas, la noche antes, suelo mirar un montón de fotografías que me gustan de grandes fotógrafos, sobre todo de paisajes y arquitectura para que me ayuden a situarme espacialmente cuando estoy en medio del reportaje; veo películas que me inspiren y reviso una última vez (o varias) el equipo.
La llegada al reportaje de preparativos.
Al llegar a la primera localización de los preparativos, lo primero es coger el material que vamos a utilizar, realizar las primaras fotografías de los alrededores y paisaje si procede y una vez tenemos estas primeras instantáneas, empezamos con los preparativos, del novio / novia. A veces estos preparativos empiezan en la peluquería, otras en las casa u hoteles.
La ceremonia.
Llegar antes que el novio/a para poder realizar las primeras imágenes del lugar, decoración y paisaje para seguir con las fotografías de ambiente previas a la ceremonia con los invitados y la llegada del novio. Realizo la entrada del novio, mientras esperamos a por la novia, ya se ven los primeros nervios en la familia… pero ya está aquí, es la novia.
Unas pocas fotografías dentro del coche y después, otras bajando de este, ayudada como siempre del padrino o chófer del vehículo. Unas cuantas fotografías mientras nos relajamos antes de proceder a la entrada y listo. Entramos al lugar de la ceremonia.
El Vals y Fiesta.
La parte final de un día genial, si me preguntáis como hago las fotografías de esta parte, sólo os diré que añadiendo luz y color… Si, se que es un poco ambigua esta descripción, pero es básicamente lo que hago. Para que las fotografías no sean planas y faltas de emoción, suelo colocar varios flashes distribuidos por la sala donde se realice el vals y el baile, dependiendo de como sea la sala, del espacio y de otros factores añado más o menos puntos de luz, para que queden fotos espectaculares. Además de esto suelo coordinarme con el DJ y su equipo de luces….